Por PAOLA FLORES e ISABEL DEBRE
LA PAZ, Bolivia (AP) — Tras casi 20 años de hegemonía el izquierdista Movimiento Al Socialismo (MAS) de Bolivia obtuvo apenas dos diputados y quedó sin senadores en la Asamblea Legislativa, según los resultados oficiales de los comicios del 17 de agosto presentados el martes por el Tribunal Supremo Electoral
El centrista Rodrigo Paz y el derechista Jorge “Tuto” Quiroga están habilitados para una histórica segunda vuelta presidencial el 19 de octubre. Se espera que el miércoles el Tribunal haga la convocatoria al balotaje.
De un total de 166 asambleístas, el partido de Paz obtuvo 65 y el de Quiroga 51, mientras que la alianza del empresario Samuel Doria Medina se quedó con 32. En tanto, la fuerza Súmate del alcalde de la región de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, consiguió seis legisladores.
“Lo que estamos viendo es un desplazamiento hacia la centroderecha del bloque nacional popular como llamó el MAS a sus bases sociales. Hay un desmembramiento en varios pedazos”, dijo la comunicadora política Verónica Rocha.
En las anteriores elecciones de 2020 el MAS había obtenido 96 asambleístas, lo que le permitió controlar dos tercios del Congreso. Pero la crisis económica y la disputa entre el exmandatario Evo Morales (2006-2019) y el actual presidenta Luis Arce por el control del partido lo llevaron a su peor elección.
Fracturado, el MAS llevó este año como candidato a la presidencia al exministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, quien obtuvo 3,17% de los votos, sólo unas décimas por encima del mínimo exigido por la ley para que el partido conserve su personería jurídica.
El mejor posicionado de la izquierda fue el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, quien se postuló por una fuerza disidente del oficialismo y alcanzó 8,5% de los votos, obteniendo una representación de ocho diputados.
Otros dos partidos menores se repartieron los asambleístas restantes.
Arce culpó a Morales por la derrota de la izquierda en las elecciones para las que el exgobernante llamó a votar nulo, que llegó al récord de 19,87% cuando en anteriores comicios rondaba el 4%.
“El MAS está prácticamente muerto como partido, como movimiento; está acabado”, dijo Diego von Vacano, politólogo especializado en América Latina y profesor en la Universidad de Texas A&M. Esto ”muestra el fin de la izquierda en Bolivia, pero también que Evo Morales sigue siendo una voz y una fuerza muy poderosa en la política”, agregó.
Los resultados muestran que ninguna de las fuerzas obtuvo los dos tercios que se necesitan para aprobar las leyes y así poder poner en marcha su plan de gobierno, por lo que el ganador del balotaje “va a necesitar hacer pactos entre las fuerzas para poder avanzar”, dijo el analista político Carlos Saavedra.
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El corresponsal de The Associated Press Carlos Valdez colaboró en este despacho.