Associated Press
MOSCÚ (AP) — Un desfile militar comenzó el viernes en la plaza Roja de Moscú para conmemorar el 80vo aniversario de la derrota de la Alemania nazi en la II Guerra Mundial, al que asistieron el presidente de Rusia, Vladímir Putin, y una serie de líderes extranjeros, incluidos el presidente chino, Xi Jinping, y el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.
El Día de la Victoria, que se celebra en Rusia el 9 de mayo, es la festividad secular más importante del país. Un desfile a través de la plaza Roja y otras ceremonias subrayan los esfuerzos de Moscú por proyectar su poder global y consolidar las alianzas que ha forjado mientras busca un contrapeso a Occidente en medio del conflicto en Ucrania, que ya ha entrado en su cuarto año.
La II Guerra Mundial es un caso inusual en la historia divisiva de la nación bajo el régimen comunista, reverenciado por todos los grupos políticos. El Kremlin ha aprovechado ese sentimiento para fomentar el orgullo nacional y subrayar la posición de Rusia como una potencia global.
La Unión Soviética perdió la demoledora cifra de 27 millones de personas en lo que llama la Gran Guerra de la Patria entre 1941 y 1945, un sacrificio enorme que dejó una profunda cicatriz en la psique nacional.
Las festividades de este año se vieron ensombrecidas por ataques de drones ucranianos dirigidos a Moscú y graves interrupciones en los aeropuertos de la capital.
La aerolínea bandera rusa Aeroflot canceló el miércoles por la mañana más de 100 vuelos hacia y desde Moscú, y retrasó más de 140 otros mientras el Ejército repelía sucesivos ataques de drones ucranianos en la capital.
Las autoridades rusas han reforzado la seguridad antes del desfile y se han reportado cortes de internet móvil en medio de contramedidas electrónicas destinadas a frustrar más ataques potenciales de drones.
En un discurso en el desfile, Putin elogió a las tropas rusas que luchan en Ucrania, diciendo que “estamos orgullosos de su valentía y determinación, su fuerza espiritual que siempre nos ha traído la victoria”.
El líder ruso ha declarado un alto el fuego unilateral de 72 horas a partir del miércoles para coincidir con las celebraciones del Día de la Victoria, pero advirtió que las tropas rusas responderán a cualquier ataque. Moscú ha sido reacia a aceptar una tregua de 30 días propuesta por Estados Unidos que Ucrania ha aceptado, y ha reclamado que vaya acompañada de una pausa en el suministro de armas occidentales a Ucrania y a los esfuerzos de movilización en Kiev, condiciones que Ucrania y sus aliados occidentales han rechazado.
Las autoridades ucranianas informaron de decenas de ataques rusos el viernes que mataron al menos a dos personas en las regiones de Jersón y Zaporiyia y dañaron edificios.
Mientras el desfile en la plaza Roja y otras festividades se desarrollaban en Moscú, docenas de funcionarios europeos se reunían en Leópolis, en el oeste de Ucrania, para respaldar la creación de un tribunal especial encargado de procesar a los funcionarios rusos acusados de crímenes de guerra.