Por ISABELLA VOLMERT
El vicepresidente JD Vance visita Indiana el jueves para discutir la redistribución de distritos con líderes republicanos, al tiempo que el presidente Donald Trump aumenta la presión sobre los estados gobernados por el Partido Republicano para trazar nuevos límites congresuales y dar al partido la posibilidad de ganar más escaños en las elecciones de medio mandato programadas para 2026.
Vance tiene programadas reuniones privadas con el gobernador Mike Braun y otros políticos republicanos antes de asistir a una recaudación de fondos del partido el jueves por la noche en el estado gobernado por el Partido Republicano. Braun dijo a los periodistas el martes que espera discutir varios asuntos con el vicepresidente, incluyendo la redistribución de distritos, pero señaló que no se han hecho compromisos.
“Pareciera que va a suceder en muchos estados republicanos”, indicó Braun.
La visita de Vance se produce luego que los demócratas de Texas lograran detener con éxito una votación esta semana en ese estado sobre una reestructuración de los distritos electorales, como parte de un intento de asegurar cinco escaños más inclinados hacia el los republicanos a expensas de los demócratas antes de las elecciones intermedias. El objetivo de la Casa Blanca es dar a los republicanos un camino más fácil para mantener el control de la Cámara de Representantes.
Indiana es firmemente republicano, pero los opositores a cualquier intento de redistribución de distritos planean manifestar sus objeciones el jueves con protestas y una conferencia de prensa por parte de los dos integrantes demócratas de la delegación congresual del estado.
Braun tendrá que convocar una sesión especial si decide iniciar el proceso de redefinición de distritos, pero los legisladores tienen el poder exclusivo de crear nuevos mapas.
La oficina de Braun no ha respondido a varias solicitudes enviadas por correo electrónico en busca de más detalles sobre la visita de Vance.
Los congresistas republicanos de Estados Unidos superan en número a los demócratas en Indiana 7-2, limitando las posibilidades de obtener otro escaño. La constitucionalidad de la medida también casi con certeza será impugnada en los tribunales.
Los legisladores de Indiana se han mostrado recelosos de la atención nacional en los últimos años, especialmente después que una sesión especial en 2022 diera como resultado la promulgación de una estricta prohibición del aborto. Braun es un fiel aliado de Trump en un estado con una sólida base de seguidores del presidente.
Pero Indiana también es el hogar de Mike Pence, el exvicepresidente y exgobernador cuya aproximación más medida a la política partidista aún tiene influencia entre muchos legisladores estatales.
El Partido Republicano probablemente apuntará al 1er Distrito Congresual de Indiana, un bastión demócrata de larga data que abarca Gary y otras ciudades cerca de Chicago en los límites del noroeste del estado. El escaño ocupado por el congresista federal demócrata Frank Mrvan, en su tercer mandato, ha sido considerado una posible adquisición en los últimos años a medida que los empleos sindicales de manufactura han abandonado el área, dijo Laura Merrifield Wilson, profesora de Ciencias Políticas en la Universidad de Indianápolis.
Los legisladores en Indiana redistribuyeron el distrito para que fuera ligeramente más favorables para los republicanos en las elecciones de 2022, pero no lo dividieron por completo. Los nuevos mapas no fueron impugnados en los tribunales tras ser aprobados en 2021, ni siquiera por demócratas y aliados que se habían opuesto a los cambios que también dieron un impulso al Partido Republicano en los suburbios al norte de Indianápolis.
Mrvan ganó la reelección en 2022 por un margen respetable y retuvo fácilmente su escaño nuevamente en 2024. En un comunicado el martes, Mrvan dijo que el gobierno de Trump sabe que sus políticas son “extremadamente impopulares”.
“Saben que su única esperanza para mantener el control es presionar a la Asamblea General de Indiana para que viole la Constitución de Indiana y redistribuya los escaños de la Cámara de Representantes de Estados Unidos a mitad de década”, añadió.
La opción más drástica será centrarse en el 7mo Distrito Congresual de Indiana, compuesto enteramente por el condado Marion y el bastión demócrata de Indianápolis.
Los líderes legislativos de Indiana, el presidente de la Cámara de Representantes, Todd Huston, y el presidente pro tempore del Senado, Rodric Bray, ocuparon las mismas posiciones hace cuatro años cuando la Legislatura finalizó los nuevos mapas. Ambos expresaron su aprobación del resultado final y dijeron que los límites reflejaban justamente la composición del estado.
“Creo que estos mapas reflejan la retroalimentación del público y servirán bien a los habitantes de Indiana durante la próxima década”, dijo Bray en ese momento.
Ambos líderes han estado callados sobre la posibilidad de una sesión especial. Las oficinas de Bray y Huston no respondieron a múltiples mensajes dejados por teléfono y correo electrónico el miércoles.
Los republicanos tienen una supermayoría en la Cámara de Representantes y el Senado de Indiana, lo que significa que los demócratas no podrían detener una sesión especial negándose a asistir.
Julia Vaughn, directora de Common Cause Indiana, dijo que un costoso proceso de redistribución de distritos no se verá bien para los republicanos que ajustaron el cinturón en el presupuesto estatal en la pasada sesión legislativa debido a las previsiones de ingresos. Common Cause es uno de los grupos líderes a nivel nacional que se oponen al intento de Trump para redistribuir distritos.
“No creo que haya forma de que puedan justificar gastar dólares de los contribuyentes para regresar a Indianápolis a redibujar mapas que fueron trazados hace apenas cuatro años con fines puramente partidistas”, subrayó Vaughn.